A veces nos pasa que nos quedamos mirando un punto fijo o un paisaje y descubrimos que… ¡eso es una cara!, pero no, es solo una pared despintada, una manija, ropa colgada, etc. ¿Se tratará, acaso, de un sesgo?
Este fenómeno psicológico se conoce como pareidolia, y más específicamente consiste en percibir erróneamente una forma reconocible a partir de un estímulo vago y aleatorio. Por ejemplo: reconocer una cara a partir de patrones de luces y sombras. ¿Te pasó alguna vez?
Te invitamos a mirar estas cuentas y artículos sobre algunas de estas curiosidades:
https://twitter.com/CosasConCaras?t=1B2Ve2LqidzoSJJd-AVaSg&s=08
https://twitter.com/objetoscomcara?t=mI_QiYzpkO6MDzHWM4zt_g&s=08